Desde ser afectivo hasta ser caballeroso, Diana se aseguró de heredar valores humanos al heredero del trono de la Gran Bretaña.
Con la llegada del príncipe George Alexander Louis a la casa real todos los ojos se comienzan a centrar en la influencia que ejercerán sus padres, sobre él y sus primeros años de vida.
Y aunque la princesa Diana no estará presente para celebrar el nacimiento de su primer nieto, su influencia se hará más presente que nunca gracias a la educación y valores que ella inculcó a su propio hijo.
De hecho su huella ya se emula desde el momento en el que Kate y Guillermo eligieran el mismo hospital que ella seleccionó hace 31 años para que naciera su primogénito.
Diana siempre deseó y luchó por que sus hijos llevarán una infancia lo más normal posible, situación que la hizo cambiar ciertas costumbres reales. Desde que diera a luz en el hospital St. Mary’s -Guillermo fue el primer heredero al trono en nacer fuera de palacio-, hasta llevar a sus hijos diario a la escuela, hacer visitas a parques de diversiones como Disney y Thorpe Park pasando por muestras de cariño en público y visitas a enfermos de sida, Diana mostró a los príncipes el otro lado sensible de los monarcas.
Destacamos las ocho lecciones más importantes:
* Mantén tu independencia, fue la primera lección dada.
* No pierdas tu espontaneidad, aún frente de las cámaras.
* Recuerda tus modales en todo momento y lugar. Respetuoso.
* Sé un caballero (aún cuando sea para cargar el bolso de una chica)
* Sé afectivo. Demuestra cuánto amas a tus familiares y amigos.
* Canaliza tu lado aventurero, te ayudará a liberarte del peso.
* Enfrenta tus miedos, conoce tus límtes y gustos.
* Sonríe siempre y disfruta el momento presente.
