Los ojos del mundo futbolero mirarán por un mes a Brasil ya que la Copa Confederaciones está a la vuelta de la esquina.
Mañana desde las 16h00 locales la verde-amarela inaugurará el torneo junto con Japón. Desde 1992 se juega este torneo que busca probar el aspecto logístico del país organizador del mundial de fútbol.
Brasil, que clasificó al torneo por ser anfitrión, afrontará la Copa con la misión de recuperar el terreno perdido a nivel internacional.
El conjunto amarillo fue campeón de la Copa, en 1997, al vencer a Australia, en 2005 al ganar a Alemania y en 2009 al superar a Estados Unidos.
El ‘Scrath’ es el equipo que más títulos tiene en esta competición.
Por su parte el conjunto japonés llega, al partido inaugural, con boleto seguro para disputar la Copa del Mundo, el próximo año.
Japón clasificó al certamen tras ganar la Copa de Asia, que tuvo sede en Qatar. El cuadro azul jugó seis cotejos de los cuales ganó cinco y empató por una ocasión. En el partido final venció a Australia por un merecido tanto a cero.
El estadio Mané Garrincha, construído en 1974 y remodelado para acoger a la cita mundial, será el escenario inaugural de la competición. La capacidad del estadio es de 71.000 espectadores y es de propiedad del Departamento de Deportes, Educación Física y Recreación del Distrito Federal de Brasil.
En el Mané Garrincha se jugarán siete partidos de la copa mundial , incluído un juego de cuartos de final.
La Copa Confederaciones es considerada como ‘la maldición’ ya que ninguna de las selección que ha ganado la competición, logró ganar la Copa del Mundo. Espectáculo garantizado.