En especial preocupan el aumento de los caudales del río Danubio, en Austria y Eslovaquia, y del Elba, en Alemania y la República Checa, donde continúan bloqueadas o cerradas al tráfico numerosas carreteras y vías ferroviarias.
Tras superar ayer en Viena el nivel de las devastadoras riadas de 2002, el Danubio amenaza con anegar Bratislava, la capital eslovaca, mientras que el Elba ha comenzado ya a inundar Dresde, la capital del estado alemán de Sajonia.Por eso, en Alemania, donde se cuentan 4 muertos por estas riadas, la situación de emergencia se concentró la región en torno a Dresde, mientras que en la parte sur del país la situación tendió a distenderse.