Así lo confirmaron ayer los familiares y amigos de Garra, en su blog personal, además de en su twitter, con una entrada titulada ‘Juanjo se queda en el cielo’ y en la que relatan cómo a pesar de los esfuerzos realizados para su rescate este no ha sido posible al momento.
Garra sufrió el accidente después de coronar la cima del Dhaulagiri e iniciar el descenso, momento en el que un sherpa que lo acompañaba patinó y lo arrastró, haciendo que cayera y provocando que, posiblemente, se rompiera un tobillo.
La dificultad de realizar un rescate en helicóptero, a esas alturas, impidió durante estos días que Garra haya podido ser atendido y lo ha retenido demasiado tiempo a una altura excesiva y rodeado de hielo. Paz en la tumba del deportista.