Vie. Nov 22nd, 2024

Washington, 26 may (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, visitó hoy la localidad de Moore (Oklahoma), arrasada el pasado lunes por un tornado de unos 4 kilómetros de diámetro que se cobró la vida de 24 personas, y aseguró ayuda federal a los afectados «hasta el final de la reconstrucción».

obamEl mandatario, que recorrió parte de las zonas afectadas y alentó a los vecinos que han sufrido grandes pérdidas, aseguró en rueda de prensa que la ayuda del Gobierno para las víctimas estará disponible hasta que se haya completado la reconstrucción.

«Quiero hacer saber a todos aquellos afectados por el tornado que vamos a estar con ustedes en cada paso del camino», insistió el presidente tras poder comprobar con sus propios ojos el alcance de la destrucción.

«Una imagen vale más que mil palabras», dijo tras confirmar que más de 1.200 casas han sido completamente destruidas y que alrededor de 12.000 hogares han sido afectados.

Obama ofreció una y otra vez los teléfonos y páginas web de los servicios de emergencia para que todos aquellos que lo necesiten sean asistidos y puedan volver cuanto antes a la normalidad, y pidió al resto de ciudadanos que colaboren en las labores de reconstrucción en las que ya participan cientos de voluntarios.

«Va a tomar mucho tiempo que esta comunidad se reconstruya, así que quiero instar a todos los estadounidenses a intensificar la ayuda», dijo al sugerir que se hagan donaciones a través de la página web de la Cruz Roja estadounidense.

«Ustedes tienen un corazón fuerte y no tengo duda de que van a recuperarse», alentó el mandatario a las víctimas.

Acompañado por el director de la agencia federal de emergencias (FEMA), Craig Fugate, Obama visitó también una de las escuelas de educación primaria arrasadas por el tornado y estuvo hablando con miembros de los equipos de primera respuesta.

En esa escuela, la Plaza Towers Elementary School, fallecieron 7 niños y varios adultos resultaron heridos.

Según los datos de la FEMA, 4.200 personas han pedido asistencia tras el desastre, una ayuda valorada en unos 54 millones de dólares.

El tornado, que alcanzó la categoría más alta, EF-5, arrasó unos 27 kilómetros a las afueras de Oklahoma City, destruyendo edificios enteros, dos colegios y un hospital en apenas 50 minutos.

Las autoridades locales han estimado las pérdidas provocadas por el tornado entre 1.500 y 2.000 millones de dólares y calculan que haya unos 36.000 ciudadanos afectados. EFE

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