La eliminación de los «gunners» en Múnich, pese a ganar 0-2, terminó de fraguar la desgracia para los cinco equipos británicos en competición, después de que la semana pasada ya naufragaran el Manchester United y el Celtic de Glasgow en sus cruces de octavos, ante el Real Madrid y la Juventus respectivamente.
Antes, el Chelsea ya había dado la sorpresa al convertirse en el primer campeón vigente de la máxima competición europea que quedaba eliminado en la fase de grupos, la misma ronda que vio caer al Manchester City, actual campeón de la liga inglesa.
El fútbol inglés ya sufrió en el continente la pasada temporada, cuando que solamente los «blues» superaron los octavos de final de la ‘Champions’, si bien el conjunto del español Fernando Torres defendió los intereses británicos conquistando el campeonato.
La temporada anterior había sido en cambio más favorable para los ingleses, que metieron a tres equipos en cuartos: el Chelsea, el Tottenham y el Manchester United, que terminó cayendo en la final ante el FC Barcelona (3-1).
La caída en esta edición del United ante el Real Madrid fue la más polémica de las cinco que han sufrido los equipos del Reino Unido.
Los «diablos rojos» quedaron eliminados en un encuentro en el que una tarjeta roja al portugués Luís Nani en el minuto 56 supuso un cambio de inflexión que permitió a los blancos remontar un duelo que se había complicado con un gol en propia meta del español Sergio Ramos.
Un disparo lejano del croata Luka Modric y un remate del portugués Cristiano Ronaldo, que volvía a Old Trafford cuatro años después de haber cambiado Manchester por Madrid, cerraron el 1-2 definitivo que, junto al 1-1 de la ida en el Santiago Bernabéu, condenaba a los «diablos rojos» de Alex Ferguson al infierno de la eliminación.
El Chelsea, por su parte, quedó hundido en la competición tras caer derrotado en Turín por 3-0 en la fase de grupos, un resultado que propició la marcha del italiano Roberto Di Matteo como entrenador y la contratación del español Rafa Benítez.
No sirvió a los «blues» la goleada ante el danés Nordsjælland en Stamford Bridge en la última jornada de la fase de grupos (6-1), ya que el Shakhtar Donetsk hizo valer el marcador favorable de los encuentros entre ambos para hacerse con la segunda plaza del grupo.
El avance del Manchester City de Roberto Mancini fue aún más dificultoso en el Grupo D, en el que se medía con tres rivales de altura: Real Madrid, Borussia Dortmund y Ajax.
El conjunto del argentino Sergio Agüero llegaba confiado a esta edición de la Liga de Campeones después de ganarle la liga inglesa al Manchester United la pasada temporada con un gol in extremis del «Kun» en el último encuentro del campeonato.
Con una plantilla en la que también brillan el español David Silva y el argentino Carlos Tévez, los «citizens» llegaban a la Champions por segunda vez en cuarenta años dispuestos a alcanzar las últimas fases, pero tropezaron ya en el primer encuentro, en el que perdieron por 3-2 en el Santiago Bernabéu.
Los de Mancini perdieron en Holanda (3-1), cayeron de nuevo en Alemania (1-0) y empataron sus tres encuentros en el Etihad Stadium, una trayectoria que les valió el último puesto de la liguilla, que les condenó a abandonar Europa hasta la próxima temporada.
El Celtic tuvo más suerte en la fase de grupos y logró plantarse en octavos de final cinco años después de su última aparición en esa ronda, pero los de Neil Lennon se encontraron con el escollo de la Juventus, que les abrumó en su campo (0-3) y remató la eliminatoria en Turín (2-0). EFE