Un joven en India tuvo una espeluznante sorpresa cuando regresó a su casa, días después de su propio funeral.
Mohammad Haris, un hombre indio de 20 años, dejó su hogar en el campo y salió a buscar trabajo a la ciudad de Chennai, al sur oriente del país asiático. A los 2 días de haber llegado a su destino, desapareció misteriosamente. El gerente y personal del lugar donde se hospedó se comunicaron con los padres de Haris para informarles de la desaparición de su hijo.
Inmediatamente se abrió una investigación policial, entonces llegó lo peor cuando encontraron un cuerpo putrefacto en un río. Se alertó a los padres, que acudieron a reconocer el cuerpo. Tristemente determinaron que era Haris tras identificar una cicatriz en la pierna izquierda y la ropa interior del cuerpo. Al menos eso creyeron ellos, hasta días después el joven apareció vivo, una semana después.
Según el diario The Times of India, tras haber terminado toda la ceremonia y ritos fúnebres, un familiar habló con el padre de Haris, le dijo que éste estaba en su casa sano y salvo, ya que le había pedido posada.
“Fue un espectáculo espeluznante para los residentes cuando vieron al joven caminando a casa”, dijo un oficial de policía de Chennai que estaba presente en el regreso del joven.
¿Qué pasó con el ‘muerto’?
Luego de llegar a la ciudad de Chennai, Haris dejó el hotel sin avisar a la gerencia, luego el joven sufrió un atraco. Ya que los ladrones no encontraron mayores objetos de valor, lo golpearon y lo dejaron inconsciente en una carretera a las afueras de la ciudad. Tiempo después, Haris despertó desorientado, pero días después pudo llegar a la casa de un pariente. Pero queda otra pregunta pendiente: ¿De quién era el cuerpo que se enterró? La policía sigue con las investigaciones, mientras tanto la familia de Harris se ha comprometido a devolver el cuerpo.