Los Ravens, dirigidos por John Harbaugh, el hermano de Jim, que también dirigió a los 49ers, estuvieron siempre al frente del marcador y al inicio del tercer periodo su ventaja fue de 22 puntos (28-6) hasta que se fue la luz del Mercedes-Benz Superdomes, de Nueva Orleans, y tras 34 minutos de interrupción, los 49ers llegaron recargados y sus rivales sin la energía de la primera parte.
El mariscal de campo Joe Flacco, quien se hizo acreedor al premio al Jugador Más Valioso (MVP) del Super Bowl, lanzó para tres pases de anotación y Jacoby Jones consiguió dos «touchdowns», incluyendo uno de regreso de patada de 109 yardas para poner el balón en la zona de diagonales para los Ravens.
En el primer cuarto el receptor Anquan Boldin capturó pase de 13 yardas de Flacco para conseguir el primer «touchdown» del partido y darle a los Ravens una ventaja que no perderían el resto del duelo. 
Flacco logró otro pase de una yarda al «tight end» Dennis Pitta en el segundo cuarto, también para «touchdown», y en ese mismo cuarto hizo conexión con Jones con envío de 56 yardas para su tercer envío de anotación.
En el último cuarto el pateador Justin Tucker consiguió gol de campo de 19 yardas cuando restaban 12:57 minutos para el final del partido y volvió a brillar con otro de 38 yardas cuando restaban 4:19 para el final que selló la victoria de los Ravens 34-31.
Flacco completó 22 de 33 pases para ganancia de 287 yardas y tres pases de «touchdown», sin que le hiciesen ninguna interceptación y dejó en 124,2 su índice pasador, comparado al de 91,7 del mariscal de campo de los 49ers, Colin Kaepernick.
Mientras que el apoyador defensivo Ray Lewis después de 17 temporadas como profesional se despide de la competición de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) con el segundo título de campeón del Super Bowl tras haber ganado el primero en la edición XXXV, que se disputó en Tampa (Florida) fue nombrado MVP.
Lewis no brilló como otras veces en la defensa pero consiguió siete derribos y cuatro «placajes» en su labor defensiva, mientras que el safety Ed Reed, un nativo de Nueva Orleans, consiguió la única interceptación que hubo en el partido.
Se la hicieron a Kaepernick, que rompió racha de 170 pases consecutivos de un mariscal de campo de los 49ers en el Super Bowl sin que le hubiesen interceptado un balón.
Si durante la primera parte la exhibición fue completa de los Ravens con Flacco y Jones de protagonistas a partir del apagón, Kaepernick, el corredor Frank Gore y el receptor abierto Michael Crabtree fueron los protagonistas de los tres «touchdowns» que metieron de lleno en el partido a los 49ers.
Antes, el pateador de San Francisco, David Akers, se había encargado de darle a los 49ers los seis puntos que consiguió hasta la mitad del partido con sendos goles de campo de 36 y 27 yardas en el primero y segundo cuartos, respectivamente.
Kaepernick dio su primer pase de anotación en un Super Bowl a falta de 7:20 minutos para que concluyese el tercer periodo y fue un envío de 31 yardas a Crabtree.
Luego llegó la carrera de anotación de Gore que fue de seis yardas y Kaepernick, de 25 años, en solo su segunda temporada en la NFL, lo imitó y avanzó 15 por tierra para poner el parcial de 31-29.
Sin embargo, los 49ers decidieron ir por la conversión de los dos puntos y esta vez Kaepernick no pudo encontrar a un compañero en la zona de anotación y perdieron la oportunidad de empatar el marcador.
Los Ravens tampoco aprovecharon al máximo su posesión de balón al quedarse a dos yardas de cruzar la línea de anotación con la tercera oportunidad, pero consiguieron el acierto de Tucker para el 34-29.
Luego la defensiva de los Ravens recuperó su reputación de dura y paró en las cuatro oportunidades de los 49ers para conseguir anotación, que en la cuarta no pudo completar el pase cuando faltaba 1:46 minutos para concluir el tiempo reglamentario.
Entonces surgió todo el talento y la estrategia de John Harbaugh, el entrenador en jefe de los Ravens, que corrió tres jugadas y mandó a los equipos especiales para que despejasen el balón a falta de 10 segundos en el reloj.
Los Ravens engañaron por completo a los 49ers con el despeje ya que no lo hicieron e hicieron un «safety» que les costó dos puntos pero bajaron el reloj hasta los cuatro segundos que ya no dieron opción a que Kaepernick y los 49ers pudiesen intentar un avance milagro que cambiase la historia del partido.
Kaepernick, que dejó a los 49ers con la primera derrota en los seis Super Bowls que han disputado, los cinco anteriores fueron ganados por Joe Montana (4) y Steve Young (1), concluyó el partido con 16 pases completados de 28 intentos, para ganancia de 302 yardas por aire, y un envío fue de anotación y otro interceptado.
El mariscal revelación de los 49ers también hizo siete acarreos por tierra para conseguir 62 yardas y una anotación, pero esta vez se quedó a las puertas de la gloria. EFE