Mil doscientas personas participaron en un simulacro de emergencia en el nuevo aeropuerto. Faltan horas para su apertura.
El objetivo del simulacro de emergencia que se desarrolló en el nuevo aeropuerto de Quito fue medir los tiempos de respuesta y reacción de las instituciones que prestan auxilio y seguridad, frente a una emergencia. Para ello se desplegó un operativo en el que participaron alrededor de 1.200 personas, incluidos unos 350 trabajadores del nuevo terminal aéreo.
El alcalde, Augusto Barrera, el gerente de Quiport, Philippe Baril, y el gerente de la Empresa de Servicios Aeroportuarios, Freddy Egüez, observaron el simulacro desde el terminal de pasajeros para luego trasladarse a la pista. Previo al ejercicio, el alcalde señaló que el simulacro refleja el trabajo sistemático que se ha realizado para que el nuevo aeropuerto de Quito entre en operación.
Al respecto, el burgomaestre informó que ya se emitieron las notificaciones internacionales sobre el cierre del antiguo aeropuerto, hecho que sucederá a las 19h00 del 19 de febrero, mientras que el inicio de las operaciones en la nueva terminal aérea será el 20 de febrero a las 09h00. “Estamos en la cuenta regresiva”, mencionó.
Barrera indicó que están casi listos los intercambiadores de Las Bañistas y los carriles laterales del Auqui-Primavera, que es el primer empate que se tendrá con la ruta Viva. 22 aerolíneas estarán operativas; de igual manera el transporte público que saldrá desde la Río Coca.
Más autos hacia el aeropuerto
Sobre la circulación vehicular hacia el nuevo aeropuerto, el alcalde indicó que la variación del contraflujo que se hace en el túnel Guayasamín no cambiará. La cantidad de vehículos que circulan por la Interoceánica es de entre 48.000 autos, a ese monto se sumarán 5.000 más que irán al aeropuerto, por lo tanto la programación será la misma.