Michael Schumacher, siete veces campeón mundial de Fórmula Uno, restó importancia a las críticas que le dedicó el italiano Flavio Briatore, ex director deportivo de Renault y antiguo jefe del piloto alemán en la Escudería Benetton.
Briatore, en la actualidad retirado de la Fórmula Uno, pese a ser exculpado de un supuesto fraude en el Gran Premio de Singapur 2008, afirmó que el regreso de ‘Schumi’ al Mundial (con el equipo Mercedes) puede terminar “en un desastre”.
“No vas a ser más rápido por pintarte el pelo”, dijo Briatore en alusión a Schumacher, cuyo incorporación a Mercedes desde Ferrari fue considerada por el italiano “una traición poco elegante”.
Schumacher, de 41 años, respondió en tono menor: “Personalmente, no tengo problemas en absoluto con Flavio. Le conozco bien, sé cual es su fuerza y sus debilidades”, declaró el alemán en Valencia, donde participa en los primeros entrenamientos de Fórmula Uno.
En relación con el supuesto fraude de Singapur, cuando un accidente del brasileño Nelson Piquet favoreció la victoria de su compañero en Renault, Fernando Alonso, al irrumpir en pista el coche de seguridad, Schumacher aseguró que Briatore “excedió los límites”.
“Pero creo que todos cometemos errores”, añadió el piloto alemán, “y si aprende de lo ocurrido, yo no veo ningún problema en que pueda regresar. Flavio es, sencillamente, una personalidad única”.
Schumacher a pesar de estar retirado los tres últimos años y que ahora está de vuelta, no ha dejado de entrenarse, ir al gimnasio, salir en bicicleta y recibir tratamiento médico. Habitualmente, se ejercita entre cuatro y seis horas al día.
La primera vez que Fernando Alonso se subió a un coche tenía dos años y, ahora, veintiséis después, el piloto de Fórmula 1 asegura que Ferrari le ha devuelto “a la niñez”, porque subirse al monoplaza “es el sueño de cualquiera” y el rojo era el color de sus coches de juguete.
Supersticioso, reservado, perseverante, amante del póquer y poco lector. Así se perfila Alonso en una entrevista en forma de test que publicó el diario italiano “La Stampa” en la que asegura que “no habrá día en que no piense en el equipo (Ferrari)” y que, aunque “no pueda garantizar resultados”, dará “todo y siempre”.
Alonso, que ha llegado a conducir un coche a 372 kilómetros por hora, asegura que “la velocidad da respeto, nunca miedo” y que la primera cualidad de un campeón es “soportar la presión”, la de los medios de comunicación y la del equipo. “Cuando el piloto pone el pie en el acelerador, es sólo el último anillo de una cadena de centenares de personas que trabajan para él”, asegura.
Para el piloto de Ferrari, “los suizos” son los mejores conductores de Europa, los más “respetuosos”, mientras que españoles e italianos son los más “indisciplinados”. De los cinco libros que se han escrito sobre su persona, ”todos han sido escritos con prisa para ganar dinero cuando me hice famoso”, sentencia el español. Asegura que no ha leído ninguno.
“No soy un gran lector”, confiesa. Alonso, que en sus ratos libres le gusta imitar al ex presidente del Gobierno español Jose María Aznar . EFE