Durante la premiación de este lunes, el crack recibió también regalos por el próximo nacimiento de su hijo Thiago y cuando se le preguntó si el niño nacía este martes 30 de octubre, cumpleaños número 52 de su compatriota, Diego Maradona, Messi respondió «si es así, que quilombo se va a armar...»
Lionel Messi recibió ayer la «Bota de Oro» (el botín) por ser el máximo goleador de la temporada pasada en un club de Europa, y de paso los organizadores le dieron otros premios para su hijo Thiago, pronto a nacer.
Messi agradeció a sus compañeros por recibir el premio tras haber marcado 50 goles en la temporada pasada, un número que nunca había marcado un futbolista desde que se otorga este premio en 1967.
«Es un premio grupal. Siempre que gano uno individual lo digo porque es una realidad. Este más que ninguno sin mis compañeros no habría hecho los goles que hice», sostuvo Messi, quien llegó apurado tras entrenar por la mañana con sus compañeros del Barcelona.
Fueron invitados Alejandro Sabella, técnico del seleccionado, y Carlos Bilardo, director de seleccionados de AFA, aunque el premio se lo entregó Luis Suárez, uno de los hombres del fútbol más respetado en España.
Fue quien desacartonó la premiación al afirmar que «al tío le han metido en la cabeza que tiene que hacer goles y no para de hacerlos».
Este premio solo lo había conseguido un argentino hasta hoy, el fallecido delantero Héctor «Chirola» Yazalde, al anotar 46 goles para el Sporting Lisboa en la temporada 1973/74.
En la premiación, además de lucir la bota de oro, le entregaron para su hijo Thiago, a punto de nacer, un chupete de oro y un patito de oro.