Vladimir Franz, abogado y profesor de arte dramático en una prestigiosa universidad en República Checa, se está lanzando como candidato para ser presidente, a pesar de que muchos no están de acuerdo debido a que su cuerpo está cubierto en un 90 % de tatuajes. Pese a su gran preparación intelectual, su apariencia física puede ser un impedimento para ganar los comicios.