Para algunos imperceptible, para otros insignificante y para pocos importante, hoy se celebra el Día de la Bandera ecuatoriana y los colegios realizaron la proclamación de los abanderados. Estas menciones se las ganan los mejores estudiantes, desde años inmemoriables, este es un logro que pocos lo logran y los ansían todos. Esa importancia es la que hemos perdido al pasar de los años, quizá la ilusión de tener en las manos el símbolo patrio. En fin mientras más grandes somos, menos sentimos, menos soñamos y menos creemos.
Ya no creemos ni en nosotros mismos, pensamos que los que gobiernan deben hacerse cargo de nosotros, cuando es lo contrario. Cuando somos adultos tenemos que hacernos cargo de lo que tenemos, un país lleno de adversidades, pero también de oportunidades
