En el poder desde hace 33 años, fue reelecto presidente en las elecciones del viernes pasado. El país africano intenta transitar hacia la democracia. La oposición denunció fraude.
El presidente angoleño, José Eduardo dos Santos, fue reelecto en el cargo tras las elecciones legislativas celebradas el viernes y ganadas por su partido, según reporta el domingo el diario oficial Jornal de Angola.
«El Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA), dirigido por el mandatario, es el gran vencedor de las elecciones generales de 2012, y todo apunta a una victoria por más del 75% de los votos», indica el periódico en su sitio electrónico.
La elección de Dos Santos, en el poder desde hace 33 años, se debe a que es el jefe del partido vencedor en los comicios, lo que lo convierte automáticamente en el mandatario del país por un período de cinco años. Así lo establece la nueva Constitución Nacional, adoptada en 2010.
El diario oficial añade que el movimiento Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA) confirma su plaza de segunda fuerza política del país, y que el nuevo partido opositor Casa sufrió una «gran derrota».
Según los últimos resultados parciales difundidos por la Comisión Nacional Electoral (CNE) tras el recuento del 72,5% de los votos, el MPLA obtenía el 74,1%, UNITA 17,8% y el partido Casa 4,7%.
La oposición no tardó en anunciar que estaba reuniendo pruebas de presuntos fraudes cometidos en las elecciones del viernes, en la que los angoleños debían renovar a los 220 miembros del Parlamento.
Sumido en crisis tras la cruenta guerra civil vivida después de la independencia de Portugal, el país es gobernado desde 1979 por Dos Santos, perteneciente de la fracción vencedora de ese entonces.
Las ganancias obtenidas del petróleo son altas, pero no está redistribuidas entre la población, sino que permanecen concentradas en un puñado de empresarios. Además, el sector agrícola-ganadero apenas está desarrollado y la mayor parte de la población vive en extrema pobreza.