Irán acelera la asistencia a los damnificados, por el terremoto del sábado, con la ayuda internacional de países como Azerbaiyán.
Las autoridades de Irán han acelerado la asistencia a los alrededor de 300.000 damnificados por los fuertes terremotos que el sábado causaron al menos 306 muertos y más de tres mil heridos en el noroeste del país, donde ayer se empezó a recibir la ayuda internacional.
En una intervención ante el Parlamento, la ministra de Salud iraní, Marzie Vahid Dastyerdi, explicó que la mayoría de personas muertas son mujeres y niños.
El primer cargamento de ayuda humanitaria extranjera para los damnificados llegó desde la República de Azerbaiyán, limítrofe con la zona donde se produjeron los seísmos.
El ministerio azerbaiyano envió tiendas de campaña y mantas, además de alimentos de primera necesidad, como harina, arroz, azúcar, aceite y pasta.
Tras el terremoto Turquía, Emiratos Árabes Unidos, el Vaticano, Pakistán, Rusia, Japón, Bolivia, Alemania, Siria, Bahrein, Suiza, Taiwán y Tayikistán, además de la ONU e incluso EEUU, han manifestado sus condolencias y ofrecido ayuda humanitaria.
70% se encuentra destruido
La Media Luna Roja iraní anunció que alrededor de 48.370 damnificados y personas han perdido su hogar y están alojadas en refugios o campamentos de emergencia, donde la organización ha distribuido 9.674 tiendas de campaña y 11.942 mantas. Asimismo, se informó que 230 aldeas quedaron destruidas, es decir, un 70% de la zona del terremoto.