La antorcha olímpica alcanzó ayer en su recorrido por Londres las puertas del Palacio de Buckingham, donde salieron a recibirla los príncipes Guillermo y Catalina, acompañados por el príncipe Enrique.
Vestidos con el uniforme de calle del equipo olímpico británico, los tres miembros de la familia real asistieron a uno de los relevos de la llama olímpica, que agota los últimos kilómetros de su recorrido por el Reino Unido antes de llegar hoy al Estadio Olímpico para la inauguración de los Juegos.
El recorrido de la antorcha vivió ayer la jornada más multitudinaria desde que la llama desembarcó en el Reino Unido el 18 de mayo procedente de Grecia.
En la última jornada de su recorrido, hoy la antorcha recorrerá un tramo del río Támesis a bordo de la embarcación real Gloriana, una barcaza de remos que ya abrió el desfile fluvial con motivo de la celebración de los 60 años en el trono de la reina Isabel II.
Más tarde, la antorcha se presentará en el Estadio Olímpico, donde jugará un papel protagonista en la ceremonia de inauguración.