23 abr (EFE).- Al centrocampista argentino Damián Manso, de Liga de Quito, le bastaron dos jugadas para definir la victoria de su equipo por 0-2 en la visita al Macará, y para ser considerado hoy como uno de los protagonistas de la duodécima jornada de la primera etapa del campeonato ecuatoriano.
La primera pincelada fue con un pase desde el costado derecho para que por el otro extremo anotase a placer su compatriota Claudio Bieler, máximo goleador del torneo, con doce tantos.
La segunda acción con el sello de Manso, fue con espléndido cobro de tiro libre, imposible de controlar para el portero Cristian Mora, y que puso a su equipo a dos puntos del líder del torneo local, el Independiente José Terán, que tiene 24.
Si bien, Manso aún no alcanzó el nivel futbolístico resplandeciente de 2008, con el que llevó a Liga de Quito al titulo de campeón de Copa Libertadores, sigue estando entre los jugadores con las mejores asistencias para los delanteros en el actual torneo.
«El Piojo» como también le dicen a Manso, tras su destacada actuación en la Libertadores del año 2008, pasó al Pachuca mexicano, después militó en el Jaguares, y en el 2011 lo hizo en el Monarcas Morelia, pero sin alcanzar el protagonismo que tuvo y que desde mediados del año pasado esta recuperando en Liga.
Manso debutó a los 16 años con el argentino Newell’s Old Boys, formó parte de la selección juvenil argentina dirigida por José Pekerman, luego llamado a la selección de mayores en las Eliminatorias al Mundial del 2002 dirigida por Marcelo Bielsa, aunque no alcanzó minutos de juego.
En el 2001 cambió Newell’s por el Bastia francés donde se lesionó gravemente en una de sus rodillas, quedó con una posibilidad grande del retiro obligado y definitivo.
Pero Manso no se dio por vencido, se recuperó y retornó al fútbol para ser campeón en el año 2004 en Argentina con el Old Boys. En la siguiente temporada fue figura hasta la cuarta jornada, en que volvió a lesionarse.
Edgardo Bauza, entrenador argentino de Liga de Quito lo pidió como refuerzo en 2007, jugándose la posibilidad debido a las constantes lesiones del «Piojo».
La confianza de Bauza valió para que los directivos y aficionados del cuadro capitalino esperaran pacientemente la recuperación del jugador que devolvió al año siguiente con creces la fe en él, pues Liga alcanzó la Libertadores por primera ocasión para un equipo ecuatoriano.
Manso también ha jugado en Grecia, Francia y por supuesto, en México, pero sus mejores actuaciones las ha tenido desde Ecuador con la camisa de Liga de Quito. EFE