El presidente Rafael Correa, enviará hoy una reforma hipotecaria a la Asamblea para evitar el estallido de una burbuja inmobiliaria.
El órgano parlamentario tendrá treinta días para resolver el proyecto legal que será enviado por el Ejecutivo para su trámite con carácter de urgente, dijo Rafael Correa en su habitual enlace sabatino, que fue pregrabado el pasado jueves y emitido el sábado por radio y televisión.
Precisó además, que la reforma legal se aplicará a personas que hayan contratado créditos para comprar una única vivienda familiar, con el fin de evitar que los especuladores del sector inmobiliario puedan usar la ley en su beneficio.
Asimismo, explicó, entre otros aspectos, que el proyecto de ley se aplicará a créditos que no excedan los 150 mil dólares, para que el beneficio sea dirigido única y exclusivamente a la clase media y a los pobres.
Correa dijo que el proyecto legal busca que las obligaciones contraídas en un crédito hipotecario sólo puedan ser cobradas a través de la respectiva ejecución de la hipoteca.
Explicó que si una persona pide un crédito e hipoteca para vivienda, si no puede cancelar de buena fe el crédito, entonces entregará la casa pero se extinguirá la deuda.
Recordó que en España, muchos emigrantes se endeudaron para adquirir viviendas, pero salieron terriblemente perjudicados.