Vie. Nov 22nd, 2024

2 abr (EFE).- El expresidente de Cuba Fidel Castro considera una «barbarie» la respuesta policial a las protestas sociales en ciudades importantes de Estados Unidos y Europa, según escribe hoy en una nueva entrega de sus «Reflexiones».

Las «batallas campales» entre manifestantes y «la policía bien entrenada y alimentada, con carros blindados y escafandras, repartiendo golpes, patadas y gases contra mujeres y hombres, torciendo manos y cuellos de jóvenes y viejos» muestran «las cobardes acciones contra los derechos y la vida de los ciudadanos» en esos países, a juicio de Fidel Castro.

«¿Hasta cuándo pueden durar semejantes barbaries?», se pregunta el expresidente en su artículo titulado «El mundo maravilloso del capitalismo», publicado hoy en los diarios oficiales «Granma» y «Trabajadores».

Fidel Castro afirma que «estas tragedias se irán presentando cada vez más por la televisión y la prensa en general, y serán como el pan que cada día se niega a los que menos tienen, (…)».

Tras hacer referencia a noticias sobre la posibilidad de que un gigantesco tsunami inunde las costas japonesas, y nuevos avances de la tecnología que exhiben almacenes de lujo en países de Europa occidental, Castro ironiza:»¡Verdad compatriotas que el capitalismo es cosa maravillosa!».

El líder de la Revolución cubana se encuentra retirado del poder desde 2006, cuando una grave enfermedad lo obligó a delegar en su hermano Raúl, quien asumió definitivamente la presidencia del país en 2008.

Tras cuatro años apartado de la vida pública, a partir del verano de 2010 Fidel Castro volvió a reaparecer en algunos actos como reuniones con intelectuales o presentaciones de libros de memorias.

Su más reciente aparición pública fue el encuentro que mantuvo con el papa Joseph Ratzinger durante la visita pastoral que el pontífice realizó a la isla la semana pasada.

La amenaza de una guerra nuclear y sus consecuencias para el planeta ha sido desde entonces los temas constantes abordados por Fidel Castro en sus reapariciones y artículos. EFE