27 mar (EFE).- El Bayern de Múnich inicia la recta final hacia «su» final, la que se disputará en su propio estadio, en el terreno del Olympique de Marsella, un equipo en plena tormenta que cuenta con Europa como última tabla de salvación de su temporada.
Loa dos equipos afrontan la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones en situaciones muy diferentes. Si los de Jupp Heynckes han enderezado su rumbo y reencontrado su mejor juego, los de Didier Deschamps no logran detener la caída libre en la que han entrado.
El Bayern llega al duelo de Marsella en un buen momento tras haberse clasificado a la final de la Copa de Alemania y haber resuelto con victorias, dos de ellas goleadas aplastantes, sus últimos tres partidos de la Bundesliga.
El equipo parece haberse reencontrado consigo mismo tras haber pasado por una crisis y su juego ha mejorado notablemente haciéndose más variado y menos previsible que lo que fue en un momento de la temporada.
La clave de la transformación ha sido la introducción de una rotación permanente de posiciones entre los tres hombres que forman la segunda línea de ataque, por detrás del goleador Mario Gómez cuya función es aparecer en el momento preciso en el área.
El francés Franck Ribery, que volverá a Marsella, donde militó varias temporadas, Thomas Müller y el holandés Arjen Robben suelen intercambiar posiciones, asociándose con frecuencia entre si en las bandas o en el centro lo que hace a los contrarios más difícil neutralizarlos.
El buen momento hace del Bayern favorito pese a lo cual el presidente del Consejo Directivo, Karlheinz Rummenigge, advirtió, antes de viajar a Marsella, que el equipo francés es un rival peligroso.
«No podemos tener la arrogancia de creer que la eliminatoria ya está resuelta», dijo Rummenigge y recordó que el Olympique derrotó en dos ocasiones al Borussia Dortmund en la fase de grupos -lo que no ha podido hacer el Bayern en las últimas dos temporadas- y se impuso al Inter en los octavos.
Bastian Schweinsteiger, que fue baja en la victoria del sábado por 2-0 ante el Hannover 96 por un problema en el tobillo, viajó con el equipo pero el entrenador Jupp Heynckes ha dicho que sólo decidirá en el último momento si formará parte de la convocatoria.
El Marsella afronta el encuentro como una montaña difícil de escalar, un rival a años luz del nivel mostrado por los franceses esta temporada pero también como una oportunidad de salvar un año nefasto.
Tras siete derrotas consecutivas, incluida una en Copa de Francia ante los aficionados del Quevilly, el equipo arrancó el pasado sábado un empate frente al Niza que llenó de satisfacción a un equipo que ocupa la novena posición a 13 puntos de la Liga de Campeones.
Además, el equipo afronta sus primeros cuartos de final de la máxima competición europea desde que en 1993 ganó la competición.
Por eso, en el duelo frente al Bayern tienen menos que perder que que ganar.
Deschamps no podrá contar con el meta Steve Mandanda, expulsado en el encuentro de octavos contra el Inter de Milán y el entrenador ha decidido sustituirlo por el tercer meta, el brasileño Andrade.
– Alineaciones probables:
O. Marsella: Andrade; Azpilicueta, Fanni, N’Koulou, Morel; Diarra, Mbia; Amalfitano, Valbuena, A. Ayew; Rémy o Brandao.
Bayern Múnich: Neuer; Lahm, Boateng, Badstuber, Alaba; Luiz Gustavo, Kroos; Robben, Müller, Ribery; y Gómez.
Árbitro: Carlos Velasco Carballo (ESP)
Hora: 13h45 de Ecuador
Estadio Velódromo de Marsella. EFE