18 mar (EFE).- El viceprimer ministro israelí Silvan Shalom aseguró hoy que el cierre del acceso a bancos y empresas iraníes por la red Swift, el mayor mecanismo de servicios de mensajería financiera, en cumplimiento de una decisión de la Unión Europea (UE), quizás lleve a Irán a detener sus planes nucleares.
«Irán está avanzado con su programa de armamento nuclear a fin de salvaguardar el Gobierno del régimen, pero en el momento en que estas sanciones se vuelven severas, primero con el petróleo y ahora con las trasferencias (financieras), quizás llegaremos a un punto en el que entenderán que sólo el abandono de su programa permitirá al régimen sobrevivir», dijo a la radio militar local.
Swift está sujeta a la ley belga, al tener su base de operaciones cerca de Bruselas, por lo que debe cumplir con lo acordado por los Veintisiete esta semana y ayer hizo efectiva la desconexión.
Shalom calificó la decisión de «extraordinaria» y «sin precedentes» y calculó que sus efectos serán visibles en pocas semanas.
«Todo se hace ahora con transferencias electrónicas. ¿Qué harán ahora? ¿Llevar maletas llenas de oro?», ironizó.
Las declaraciones se producen en un momento de creciente tensión ante la posibilidad de un ataque israelí contra Irán para frenar su programa nuclear, que percibe como una «amenaza existencial».
El diario «Haaretz» publicó esta semana, citando fuentes anónimas del Ministerio de Exteriores, que el Ejecutivo israelí ve el endurecimiento de las sanciones como consecuencia de sus amenazas bélicas, especialmente marcadas en las últimas semanas.
Esta mañana, en la reunión del consejo de ministros, otros ministros alabaron la medida de la UE como un paso que podría evitar la opción militar.
El titular de Finanzas, Yuval Steinitz, lo calificó de «gran golpe a la economía iraní», ya que obliga a Teherán a aceptar sólo efectivo u oro, «lo que es imposible cuando se manejan miles de millones».
«¿Es suficiente?. No lo sé. ¿Debilitará significativamente su resistencia?. Es, sin duda, un paso fundamental», argumentó.
Yuli Edelstein, ministro de Diáspora y Diplomacia Pública, también mostró su satisfacción con la medida y su certeza de que dañará la economía de Irán.
«Espero que desemboque en una decisión del régimen iraní de detener su programa nuclear», manifestó Edelstein.
La decisión de Bruselas ya recibió el pasado jueves el aplauso del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. EFE