15 mar (EFE).- Una serie de dibujos y pinturas del artista colombiano Fernando Botero que retrata las torturas que los soldados del ejército estadounidense cometieron en la prisión iraquí de Abu Ghraib durante los años 2003 y 2004 se inaugura hoy en el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos de Chile.
La muestra, que será abierta al público este viernes, incluye 37 de las 80 piezas que el pintor, escultor y dibujante de 79 años creó entre 2004 y 2005 como respuesta a los abusos, tanto físicos como morales, a los que fueron sometidos los prisioneros iraquíes en esta cárcel que las tropas norteamericanas utilizaron como centro de detención durante la guerra de Irak.
Botero se basó en las horrorosas imágenes que los propios militares estadounidenses tomaron al interior de Abu Ghraib, cerca de Bagdad, mientras torturaban a los presos iraquíes.
En esta ocasión, el pintor vivo más importante de Latinoamérica se olvida de su faceta más desenfadada y alegre para mostrar unas composiciones en las que la violencia invade cada una de las escenas que se presentan para denunciar uno de los episodios más atroces que acontecieron durante el conflicto armado de Irak.
Siguiendo el estilo comprometido de la reconocida exhibición sobre el capo de la droga, el colombiano Pablo Escobar, el pintor nacido en Medellín en 1932, huye esta vez de los colores delicados para introducir tonalidades ocres, verdes y negras que resaltan su indignación frente al mal.
Hombres encapuchados, maniatados, desnudos o vestidos con ropa interior femenina son los protagonistas de unos lienzos que se expondrán hasta el 24 de junio en este espacio de la capital chilena destinada a denunciar las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Unas escenas en las que el artista mantiene sus inconfundibles figuras corpulentas que han caracterizado su aclamado estilo figurativo presente tanto en sus dibujos como esculturas.
«Esta exposición nos permite insistir sobre un tema que consideramos muy relevante y que nos afectó aquí en Chile que es el tema de la tortura durante la dictadura», aseguró en una entrevista con Efe el director del Museo de la Memoria, Ricardo Brodsky.
Asimismo, Brodsky apunta que la cruda visión de Botero sobre lo sucedido en Abu Ghraib permite demostrar de una manera muy gráfica cómo la tortura es un tipo de humillación «completamente inaceptable».
Tras presentarse en ciudades como Roma y Nueva York, la exhibición llega a Chile de la mano de la Universidad de Berkeley, institución a la que Botero donó la serie sobre Abu Ghraib.
Así, se trata de la primera vez que estas obras se presentan en América del Sur, convirtiéndose en la primera exposición internacional que desembarca en el Museo de la Memoria desde su inauguración en el año 2010.
«Implica un reconocimiento al lugar. Esta exposición la estamos presentando antes que en Sao Paulo, que en Buenos Aires, que en Bogotá, que son capitales de la cultura», destacó Brodsky. EFE