7 mar (EFE).- Activistas medioambientales llamaron hoy a los alemanes a sumarse el próximo domingo a las manifestaciones antinucleares en varias ciudades del país, con motivo del primer aniversario de la catástrofe en la central japonesa de Fukushima.
Bajo el lema «Fukushima advierte: apagón nuclear ya», la Liga para la Protección del Medio Ambiente y de la Naturaleza (BUND, por sus siglas en alemán) tiene previsto celebrar concentraciones en cinco ciudades y organizar, además, una cadena humana con luces de 75 kilómetros.
«El aniversario de la catástrofe nuclear de Fukushima debe servir de advertencia para acelerar, y no frenar, el apagón nuclear» en Alemania, previsto para 2022, declaró en una rueda de prensa en Berlín Thorben Becker, experto del BUND en materia energética.
Asimismo, criticó al Gobierno federal por poner freno al desarrollo de las energías renovables, al reducir las subvenciones a la solar «mientras nueve reactores nucleares continúan funcionando».
«Al mismo tiempo, el Gobierno no actúa en una cuestión tan importante como la reducción del consumo eléctrico e intenta aguar la directiva europea sobre eficiencia energética», agregó.
Según los organizadores de las protestas, que esperan congregar a más de 20.000 participantes, mientras siga habiendo plantas atómicas en funcionamiento, continuarán las emisiones radiactivas a la atmósfera, podrían darse catástrofes similares a la de Fukushima y seguirán aumentando los residuos nucleares.
Los activistas reclaman en un comunicado un «rápido desarrollo de las energías de forma descentralizada, democrática y social».
«No existe un uso pacifico de la energía nuclear», afirman los ecologistas, que califican de «injustificable» el funcionamiento todavía de reactores y plantas atómicas en el país.
En junio del año pasado, el Bundestag (cámara baja del Parlamento alemán) aprobó el abandono definitivo de la energía nuclear hasta 2022, con el cierre paulatino de los diecisiete reactores que todavía funcionaban en el país y de los que ocho ya se encuentran desconectados de la red.
La oposición, que también votó a favor de la ley, no dejó de criticar el oportunismo político de la medida, planteada por la canciller alemana, Angela Merkel, con carácter de urgencia tras la catástrofe de Fukushima.
La propuesta supuso un cambio radical frente a la anterior política energética del Gobierno de Merkel, que menos de un año antes había aprobado un plan que reforzaba la importancia de la energía atómica. EFE