La cantante y actriz Whitney Houston murió el sábado, tras consumir alcohol con alprazolam un medicamento para la ansiedad y depresión.
A la diva afroamericana de 48 años, Whitney Houston la encontraron muerta, la tarde del sábado, en un hotel de Los Ángeles.
La noticia de su muerte provocó una ola de reacción en los medios de comunicación social, fans y celebridades. “Hemos perdido otra leyenda. Amor y oraciones para la familia de Whitney. La vamos a extrañar”, publicó Christina Aguilera en Twitter.
Los latinos como Enrique Iglesias, quien realizó un dueto con ella, así como Marc Anthony, Ricky Martin y Gloria Estefan también han dejado ver su tristeza ante lo acontecido.
A Houston, la música la meció desde la cuna: su madre fue cantante de folk-blues y su padre dirigió un coro. Era sobrina de la cantante Dionne Warwick y Aretha Franklin fue su madrina.
Sofisticada, elegante y muy esbelta fue la intérprete que más discos vendió con su potente y sensual voz. Lo que la convierte, de acuerdo con Guinness World Records, la artista más galardonada de todos los tiempos, hasta la fecha, con un total de 415 premios en toda su carrera musical.
Sin embargo, su brillante carrera se vio opacada a partir de su matrimonio, en 1992, con Bobby Brown, con quien tuvo una hija (Bobby Kristina). La pareja se separó en el 2006, tras 14 años de relación que la desgastó emocionalmente y la llevó a las drogas.
En septiembre de 2009, afirmó que estaba muy recuperada tras haber sido adicta a la marihuana y cocaína, cuando estaba casada con Brown. Pero reconoció que aunque todavía se sentía atraída por las drogas dijo confiar en Dios para superar la mayor tentación de su vida.
Houston reinó en la música pop pero el consumo de drogas le han pasado factura. Pero, sin lugar a dudas, el mundo acaba de perder una de las voces más cálidas y aterciopelada de la música.