Ecuador desactivará las minas antipersonales que aún se encuentran enterradas desde 1995 en la frontera con Perú.
Esta es una tarea a cargo de un centenar de soldados que forman parte del Comando de Desminado del Cuerpo de Ingenieros del Ejército.
Esta unidad especial del Ejército escudriña palmo a palmo las zonas minadas por militares de ambos países durante el conflicto bélico de 1995, en una misión que irá hasta el 2023, cuando se prevé declarar a Ecuador libre de ese tipo de explosivos.
Por una franja de unos 70 kilómetros no desmarcada en la frontera amazónica común, Ecuador y Perú se enzarzaron en una guerra no declarada entre enero y febrero de 1995, lío que fue resuelto en octubre de 1998 con la firma de un acuerdo de paz.
Ambos ejércitos se comprometieron a compartir información para ubicar, desactivar y destruir las minas enterradas, aunque la tarea se ha vuelto difícil, debido a que miles de ellas habían sido colocadas sin un procedimiento adecuado.
“Este es el oficio más peligroso, porque se lucha contra un enemigo invisible” señaló William Sánchez, oficial del ejército que dirige las labores.