Al menos 44 personas murieron ayer al estrellarse un avión de pasajeros ruso Yak-42 en la región de Yaroslavl, a unos 200 kilómetros al norte de Moscú, señalaron fuentes policiales.
Un representante de la policía, citado por la agencia oficial RIA-Nóvosti, indicó que a bordo de la aeronave viajaban 37 integrantes del equipo de hockey sobre hielo Lokomotiv y ocho miembros de la tripulación, y añadió que dos de los ocupantes del aparato sobrevivieron al accidente.
Por su parte, el Ministerio de Sanidad de Rusia sostuvo que los supervivientes son dos: un jugador de hockey y un miembro de la tripulación, y que ambos se encuentran en estado grave debido a los golpes.
El aparato, un trimotor, se estrelló poco después de despegar y quedó envuelto en llamas, dijeron fuentes de los servicios seguridad a la agencia rusa Interfax.
“El Yak-42 se precipitó a tierra a dos kilómetros del aeropuerto de Tuloshna, Yaroslavl”, declaró un portavoz oficial, que añadió que el accidente se produjo cerca de las 16.05 hora local.
La aeronave, perteneciente a la compañía Yak-Service y en servicio desde 1993, tenía como destino el aeropuerto de Minsk, la capital de Bielorrusia, y según fuentes de la aviación civil rusa citadas por la agencia Interfax, su certificación de vuelo expiraba el próximo mes de octubre.
El Lokomotiv Yaroslavl, tres veces campeón de Rusia, militan varios jugadores extranjeros, de Suecia, Polonia, Ucrania, República Checa, Alemania.
El equipo de hockey viajaba a la capital bielorrusa para disputar hoy un partido de liga con el Dinamo de Minsk. Llantos y desesperación en los familiares de las víctimas mortales. Dolor.