Muchas dudas y reacciones ha generado el reciente decreto de excepción en el sistema judicial del país. Lo cierto es que a pesar de que este sistema requiere de una reestructuración total, para su correcto funcionamiento, el ejecutivo ha transgredido la autonomía de esta instancia.
Pues mediante el estado de excepción se podrán tomar decisiones desde el primer mandatario. Esto dentro de la coyuntura del juicio establecido en contra de Emilio Palacio y diario El Universo, que no encuentran solución.
Esperemos que todo este embrollo no entorpesca los juicios que siguen represados en los juzgados del país. En todo caso habrá que estar vigilantes durante estos 60 días. La justicia no puede volverse un mecanismo más de búsqueda de poder.
