Vie. Nov 22nd, 2024

Por Raúl Cruz Molina:

Hace 46 largos años irrumpió ‘Mundo Deportivo’ en la radiotelefonía nacional. Su aparición fue demoledora, repleta de ingenio, calidad, categoría y carisma. La ‘voz con ángel’ de Carlos Efraín Machado, le dio otros ribetes a las audiciones regulares y a las transmisiones deportivas. Fue un innovador nato en nuestro medio y la audiencia no reparó en regalarle como tributo de agradecimiento, la sintonía total.
Nadie en la historia del relato deportivo en nuestro país ha calado tan hondo en el corazón de la gente. Nadie ha devorado a la audiencia como lo hizo Machado en sus casi cuatro décadas de esplendor. Nadie fue capaz de acaparar la sintonía, hasta convertirla en un eco gigantesco, como lo hizo, ese trotamundos del micrófono, que se retiró hace cinco años, tras cumplir un ciclo memorable, que no tiene parangón y que difícilmente será superado.
Machado fue la voz del fútbol. La más grande, la más chispeante, la más inspirada. Fue y será una voz eterna. La voz del gol, que dibujó los momentos más brillantes de nuestro balompié. Nueva Emisora Central fue su gran obra. Fue el motor que movió su vida. Su rica trayectoria que abarcó la cobertura de varios mundiales, Copas de América, Copas Libertadores, y tantos eventos que fueron descritos con su clase incomparable desde cualquier sitio del globo terráqueo.
La voz nasal de Carlos Machado fue y será un clásico. Una parte viva de la leyenda del fútbol, porque el relato deportivo es parte de ese mundo maravilloso y nostálgico que rodea al balompié. Los domingos no eran lo mismo sin sentir en el alma los goles de Carlos Efraín, salidos con tintes de poemas populares desde cualquier lugar del mapa balompédico nacional.
Su iniciativa revolucionaria, le dio otro cariz al trabajo deportivo radial. Fue el primero en transmitir el campeonato nacional, en directo desde todos los rincones. Un domingo cualquiera, era capaz de aparecer en Quito, abriendo el preliminar de las salvajes tripletas que se programaban en esos tiempos; una hora más tarde volar a Manta y pedir el paso desde el Jocay, y al caer la tarde y noche, desde el viejo y querido estadio Modelo de Guayaquil, rematar la diabólica jornada, relatando y gritando los goles, con la misma pasión, como si acabara de levantarse para desayunar.
Lo suyo fue épico. A su enorme calidad, a su talento, a su don traído desde la cuna, lo aderezó con una voluntad inquebrantable de trabajo. Con esfuerzo, con coraje. Llegaba de smoking, pero inmeditamente se ponía el overol, para mover el engranaje de esa fábrica de palabras y emociones, que guió por tantos años con enorme sabiduría, y que lo convirtieron en el ‘dueño del aire’. Así. Sin lisonjas ni exageraciones. Machado fue un monstruo del relato deportivo.
Nadie que le guste el fútbol y la radio puede olvidar sus memorables audiciones. ‘Su tango y su gol’, y ‘su’ Mundo Deportivo, al que convirtió en primera tribuna por el peso y la influencia de sus opiniones con sentido nacional, tal como reza el slogan que fue su caballo de batalla y slogan de presentación. Nueva Emisora Central bajo su sabio comando se convirtió en una escuela en la que nos formamos varios periodistas en todas las épocas.
Las primeras horas del viernes fueron sacudidas con la noticia de su muerte, después de soportar una larga y penosa enfermedad.
Se ha ido el ‘Maestro’, Me inclino reverente ante su tumba. Se marchó dejando un legado que caló hondo en el pueblo futbolero. Ruedan lágrimas de tristeza por mis mejillas. Se fue un triunfador. Un ejemplo que perdurará en el tiempo. Que Dios lo tenga en su seno.

El último adiós a un grande del relato

En medio de sollozos y lágrimas de tristeza de conocidos y allegados a la familia Machado, se realizó el sepelio del periodista deportivo, Carlos Efraín Machado, quien el pasado viernes a las 09h03 sufrió un paro cardiáco que terminó con su vida, a los 78 años. Los restos de Machado, fueron velados en el Coliseo Quitumbe, de la Concentración Deportiva de Pichincha, hasta el sábado a las 12h00. Tras las notas de pesar por parte de los asistentes al velatorio ante la terrible pérdida, el cuerpo del relator fue trasladado hasta el Cementerio Jardines del Valle en el sector del Valle de los Chillos, a las 14h00.
El último adiós a la ‘Voz del pueblo’, se dio bajo un intenso sol y cánticos en honor a uno de los mejores periodistas deportivos del país.

Por adm