La Empresa Eléctrica Guayaquil pasó oficialmente a manos del Estado tras la firma del decreto ejecutivo que la convierte en empresa pública.
El presidente de la República, Rafael Correa fue quien hizo el anuncio.
El Secretario Jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, leyó el decreto anunciando la supresión de la Unidad Eléctrica de Guayaquil, Udeleg, tras haber concluido el cruce de cuentas con lo que se determinó que el Estado tiene un saldo favorable por más de 388 millones de dólares.
Mera afirmó que se le reconocieron 173 millones de dólares al ex propietario de la Empresa Eléctrica antes llamada Emelec, Fernando Aspiazu. Sin embargo, ese dinero no se pagaría directamente, porque se cruzan con los 572 millones que el Estado pagó a los depositantes del Banco del Progreso.
De esta forma la eléctrica se integra a la Corporación Nacional de Electricidad, luego de cuatro años de iniciado el proceso sobre los bienes de Aspiazu, entre los que está la empresa.