Jue. Nov 21st, 2024

Un joven llora al pie de los ataúdes de sus pequeñas hijas. Su esposa con 17 años de edad presentó complicaciones en su embarazo por lo que tuvo que ser ingresada de urgencia a la maternidad de la capital.
Los galenos le indicaron que era necesario practicarle una cesarea. Después de varias horas de espera una de ellas murió en el vientre de su madre. Minutos después falleció la otra. Los médicos le pidieron al joven padre que firme un documento que certifique la muerte de sus hijas. “Retire los cuerpos de mis pequeñas. No tuve dinero para llevarlas a una clínica privada. Mi pobreza fue la tumba de mis niñas”.
“Llamé a varios centros médicos públicos de Quito, pero en ninguno había capacidad”, señaló con dolor. La madre sigue internada en la maternidad mientras que sus hijas serán enterradas hoy. Profunda tristeza.

Por kochoa