El Gobierno boliviano decretó 30 días de duelo nacional, tras el fallecimiento de Lidia Gueiler, la primera mujer presidenta del país, que murió en La Paz a los 89 años, debido a una prolongada enfermedad. El nieto de Gueiler, Luis Eduardo Siles, fue el que dio a conocer la noticia a las autoridades, y expresó que era un momento difícil no sólo para las autoridades sino para el país.
Ante el anuncio, el presidente boliviano, Evo Morales, expresó su sentimiento de pesar profundo, y en su pronunciamiento, afirmó que la historia democrática boliviana siempre rendirá honor a su memoria.
