El periplo a Mar del Plata terminó con nota de aprobación. La Tricolor jugó un buen partido con sus noveles incorporaciones.
La cancha estuvo en pésimas condiciones. La torrencial lluvia que cayó en la mayor parte del encuentro le restó brillantez al juego.
El empate fue justo, porque ambos equipos arriesgaron sobre los palos adversarios. Fue hermosa la jugada del primer gol compatriota. La escalada de Giovanni Nazareno resultó imparable para el cuarteto defensivo del once que dirige el ‘Checho’ Batista. El centro al corazón del área, tras ganar la raya de fondo, fue acariciado por Michael Jackson Quiñónez con personalidad y precisión. El 1 0 duró pronto, porque Argentina reaccionó y sacudió dos veces el pórtico defendido por Marcelo Elizaga.
La igualada del combinado tricolor llegó en la segunda etapa. Voltearon a Segundo Alejandro Castillo y el propio afectado cambió el lanzamiento fatídico por gol.
Quedan importantes conclusiones. Michael puede servir como organizador del juego. Nazareno ya es una realidad. Sus escaladas son punzantes y tienen mensaje de gol. Renato Ibarra es un jugador que está para los grandes compromisos, a pesar de su evidente juventud. Es claramente, el jugador con mayor futuro que tiene el balompié nacional. No le pesa la responsabilidad. Es un volante de toda la cancha, de esos que derraman pundonor y también poder en su juego. Fue buena la aparición de Fricson Erazo. No conformó el aporte del ‘Mago’ Franklin Salas. Por edad y por sus maltratada condición física, es evidente que ya no está para la alta competencia. Lo suyo fue un premio por sus últimos golazos con la blusa del modesto Deportivo Imbabura.
Se nota que Reinaldo Rueda aún no encuentra la dupla para el centro de la zaga. El ‘Beto’ Araujo es una posibilidad, ahora que volvió después de una complicada lesión. El zaguero de la ‘U’ está en condiciones de ofrecer el liderazgo y el aplomo, que no han sido capaces de aportar Isaac Mina, Jairo Campos y Jorge Guagua. El trabajo aun está en construcción. Están las bases y los jugadores, falta consolidar la estructura. Y ese no es un tema simple.
Por: Raúl Cruz Molina