El choque de hoy (19h15) ante Independiente en el estadio de los ‘Diablos Rojos’ no tiene los ribetes de crucial. Liga puede afrontar el compromiso sin la agobiante obligación de alcanzar un resultado positivo. Inclusive una derrota sin marcador abultado, deja ría al once de Bauza en la ruta de llegada, sin alterar sus posibilidades, siempre y cuando, derrote al equipo mendocino en el partido de vuelta en la cancha de Ponciano.
Ese ahorro sensacional que tiene el equipo del ‘Patón’ en el gol diferencia (+6), es un caudal de respaldo, que su estratega había anticipado en las horas previas a la apertura del ‘Grupo de la Muerte’.
“El gol diferencia va a ser decisivo en el balance final”, proclamó el estratega rosarino y tuvo toda la razón. Por esa circunstancia, Liga se apuró en su campo, a masacrar a su rivales, para contar con un respaldo de goles, que ahora es el talismán que apuntala su sueño para seguir en carrera.
Nadie quita, que la ‘U’ pueda arañar un resultado positivo en el difícil reducto del equipo más ganador de la Copa Libertadores de América. Independiente no ha bajado los brazos, pensando en que una victoria esta noche y un triunfo en su salida final ante Peñarol en el Centenario, le darían el pasaporte a la siguiente ronda. En ese caso, el que se colocaría al filo del abismo sería Peñarol, apostando todas las fichas, a que la ‘U’ doblegue a Godoy Cruz en la ‘Casa Blanca’. Para salvar este paso, que siempre acarrea un riesgo, el equipo albo debería luchar por obtener esta noche, al menos un empate, que dejaría fuera de combate al cuadro de Avellaneda, cuyo técnico levanta polvareda y fomenta un clima bélico para ‘asustar’ a la tropa universitaria, que ya no come cuentos, dada su enorme experiencia y jerarquía. Va a ser un partido bravo, que Liga deberá afrontar con inteligencia, jugando con los nervios y el apremio de la urgida plantilla argentina.
Por: Raúl Cruz Molina