La responsabilidad Social Corporativa (RSC) en las empresas ecuatorianas no tiene un modelo de gestión institucionalizado que esté dirigido a un programa constante de actividades con las comunidades y medioambientes, pero es una actividad que va en crecimiento, manifestó Alejandra Troya, consultora de la empresa Deloitte.
Troya añade que hace 10 años no existía ningún indicio de responsabilidad social en las empresas, pero en la actualidad varias compañías han iniciado un proceso de acercamiento con el entorno, trabajadores y comunidades.
Así, en un estudio realizado por Deloitte a aproximadamente 100 empresas de Quito y Guayaquil, se puedo evidenciar que 35% de las compañías consultadas dijo que hace menos de dos años realiza RSC, 25% manifestó que de dos cinco años han iniciado acercamientos con sus entornos, 8% dijo que lleva entre cinco y ocho años procesos de RSC y 32% afirmó que realiza por más de ocho años actividades de responsabilidad social.
Por otro lado, 84% calificó de alta importancia a la RSC para su negocio, mientras que 11% dijo que la importancia es mediana y 5% manifestó que es baja.
Asimismo, 53% de las empresas encuestadas dijo que sí tiene un plan de RSC, 25% dijo que está en proceso y 22% manifestó que no.
El estudio de Deloitte sostiene que las ganancias que obtienen las empresas pueden ser económicas si se trata de ahorrar energía, agua, etc., pero que su principal rédito consiste en adquirir o aumentar una buena reputación con sus stakeholders (personas que pueden ser afectadas positivamente o negativamente por la actividad de una empresa