La brillante diva de los ojos violetas, falleció ayer después de dos meses de hospitalización. Hollywood perdió a su bella novia.
La legendaria actriz estadounidense, Elizabeth Taylor, famosa por sus deslumbrantes ojos violeta, sus ocho matrimonios y su carrera cinematográfica, murió ayer a los 79 años, dejando atrás una carrera de más de medio siglo.
Taylor llevaba seis semanas ingresada en el hospital Cedars-Sinai de Los Ángeles por una insuficiencia cardíaca, que ya padecía desde hace tiempo y que se complicó recientemente, informó un comunicado de la familia.
Al momento de su muerte estaba rodeada por sus hijos: Michael, Christopher, Liza Todd y Maria Burton, además de 10 nietos y cuatro bisnietos.
“Mi madre era una mujer extraordinaria que vivió la vida al máximo, con gran pasión, humor y amor”, dijo Michael Wilding.
Taylor ganó dos premios Oscar como mejor actriz. El primero por su retrato de una joven de clase alta en ‘Butterfield 8’, una película que se dice que Taylor odiaba. El segundo, por ‘Who’s Afraid of Virginia Woolf’, considerada su mejor obra y uno de los numerosos filmes que interpretó junto a Richard Burton.
Burton fue uno de los grandes amores de Taylor. Se casó y se divorció de él dos veces, en una vida en la que sus tormentosas relaciones fuera de la pantalla a menudo eclipsaban su brillante carrera actoral.
Se alejó de la mirada de los focos en los últimos años, cuando su salud comenzó a fallar, pero hizo una notoria aparición pública cuando asistió en 2009 al funeral de su viejo amigo Michael Jackson.
VIDA EXITOSA
Nacida en Londres, el 27 de febrero de 1932, se trasladó a California (oeste de EEUU) con sus padres en 1939, cuando comenzaba la Segunda Guerra Mundial.
No pasó mucho tiempo hasta que fue descubierta por la novia del presidente de Universal, en la galería de arte de su padre.
Debutó en 1942 en ‘There’s One Born Every Minute’ y en 1944 ya se había convertido en una estrella infantil con ‘National Velvet’, la historia de una niña que se disfraza de varón para montar su caballo en un concurso nacional.
Se casó por primera vez en 1950, a los 18 años con el heredero de la cadena hotelera Nicky Hilton. El matrimonio duró 203 días y colapsó en medio de abusos verbales y físicos, tras una fastuosa boda y una larga luna de miel en Europa.
Taylor salió adelante y en 1952 se casó con la estrella de televisión, Michael Wilding, 19 años mayor que ella. Tuvieron dos hijos, Michael y Christopher.
Si bien Taylor dijo que Wilding le había dado estabilidad, no fue suficiente para ella. Pidió el divorcio en 1956 y, pocos días después de su separación, el productor Michael Todd le pidió la mano.
De carácter fuerte y dominante, fue el primer gran amor de Taylor. Tuvieron una hija, Elizabeth Frances, en agosto de 1957, pero siete meses después un trágico accidente aéreo mató a Todd en Nuevo México.
Devastada, la actriz fue al funeral de su marido con su mejor amigo, el cantante Eddie Fisher, con quien luego tuvo un romance y se terminó casando en 1959.
Luego vino ‘Cleopatra’, “seguramente la pieza más estrafalaria que haya perpetrado la industria del entretenimiento”, como dijo ella misma sobre la producción.
En el set de filmación conoció a Burton y se casaron en 1964, en Montreal. Para ese momento estaban filmando ‘Who’s Afraid of Virginia Woolf’, el desgarrador retrato de un matrimonio destrozado por la bebida y el desánimo.
Se divorciaron en junio de 1974 y se volvieron a casar en octubre del año siguiente en Botsuana, para divorciarse de nuevo en 1976.
Sus dos siguientes matrimonios fueron romances inesperados incentivados por fugaces deseos.