Lima, (EFE).- Los pobladores de una localidad minera de la región Puno, al sureste de Perú, quemaron vivos a tres delincuentes que intentaron robar oro de un centro de acopio, según confirmó hoy a Efe la policía peruana.
Los hechos ocurrieron el pasado viernes cuando un grupo de delincuentes ingresó a un centro de acopio de oro del poblado minero La Rinconada, en el distrito de Ananea, y se llevó una cantidad del preciado metal.
Sin embargo, un grupo de pobladores se organizó para capturarlos y detuvo a cuatro de los asaltantes, que llevaban el oro robado.
Después de un rápido juicio popular, los pobladores decidieron quemar vivos a tres de los asaltantes, cuyos restos fueron encontrados ayer por la policía, y el cuarto se salvó al declarar que fue obligado por el resto, según detalló el diario Perú.21.
La policía intentó rescatar a los delincuentes, pero los pobladores no les permitieron ingresar al lugar del ajusticiamiento.
Por tal motivo, el fiscal de la zona procedió ayer a realizar el levantamiento de los cadáveres, dos de ellos cerca al río Lunar de Oro, y el tercero en un campo deportivo de La Rinconada.
Aparentemente, los pobladores justificaron su acción para poner freno a los robos que han sufrido en los últimos meses.