En conmemoración del día mundial de la comprensión y la paz, los capitalinos hicieron sonar su “Campana de la paz” ubicada en el parque la Carolina. El monumento es una de las 19 réplicas que existen en el planeta. En 1999, Japón donó la campana al país y se la colocó donde actualmente reposa. Sin embargo, en 2008 fue sustraída por desadaptados. Quince días permaneció en manos de la delincuencia y justo antes de ser fundida fue recuperada por la policía. En febrero del 2010, las autoridades municipales la reestablecieron a su lugar original, y un año después, vuelve a repicar en la ciudad. “En este momento en que algunos países sufren el horror de la guerra, con pérdidas de vida ensangrentadas, el mensaje de paz no puede ser más oportuno”, señaló Marcelo Ávila, ex presidente del Club Rotario de Quito. La obra original, localizada en el país del Sol Naciente, fue levantada tras la segunda guerra mundial, como una manifestación pacifista. Fue fabricada con la fundición de metales y de monedas de 103 países,
