Un nuevo derrame de petróleo se produjo en el río Teaone. Este es el segundo de grandes alcances en un año. La contaminación llegó al río Esmeraldas y al Océano Pacífico. Los habitantes de las riberas del río piden a las autoridades que tomen cartas en el asunto, ya que estos inconvenientes causan daños en el ambiente y en la salud de los habitantes. Varios pobladores se dieron cuenta del derrame cuando sus hijos se metieron a nadar al río y sus cuerpos salieron embarrados del combustible.
Las autoridades de la Refinería respondieron al hecho con gran hermetismo, al punto de impedir que el alcalde de Esmeraldas, Ernesto Estupiñán ingrese a la planta. Por lo que anunció que iniciará un proceso legal en contra de la refinería.