Cuatro niños permanecían ingresados hoy en un hospital público de la periferia de Buenos Aires por las lesiones sufridas al ser alcanzados por rayos durante la tormenta del martes, que causó la muerte de otras cuatro personas.
Uno de los niños, de siete años, está «grave» en una sala de cuidados intensivos con respirador mecánico por haber sufrido un paro cardíaco que duró «varios minutos», dijo Leandro Busso, jefe de Pediatría del Hospital El Cruce, de la ciudad de Florencio Varela, a 25 kilómetros de Buenos Aires.
Los otros tres niños, de 8 a 11 años, se reponen favorablemente y se espera darles de alta este jueves, indicó el médico.
Durante la tormenta que se abatió el martes sobre la periferia de Buenos Aires murieron por impactos de rayos el masajista del Racing Club de fútbol, Jorge Nardi, y otras tres personas, entre ellos dos niños.
La caída del rayo en el campo de entrenamiento del Racing, causó heridas al defensa Brian Lluy, quien fue asistido en una clínica, mientras que el resto de los futbolistas y el cuerpo técnico resultaron ilesos.
Los niños fueron alcanzados por un rayo cuando habían salido de una pileta de natación y caminaban por entre los árboles en un predio deportivo de las cercanías de Florencio Varela, donde también falleció el trabajador boliviano Francisco Risso por un accidente similar.
Dos de los niños murieron en el acto mientas que otros cuatro son los que permanecen ingresados en el hospital de Florencio Varela. EFE