Al menos 14 ex paramilitares guatemaltecos murieron ayer y más de 25 resultaron heridos de gravedad, al caer a un barranco el autobús en el que se transportaban en una comunidad rural del oeste de Guatemala, informaron fuentes de socorro.
«Rescatamos 14 cadáveres de entre los hierros retorcidos del autobús, y trasladamos a 25 al hospital nacional de San Marcos, varios de ellos en estado crítico», dijo a los periodistas Cecilio Chacaj, portavoz de los Bomberos Voluntarios Municipales.
Según testigos, el autobús de la empresa Fuentes del Norte se precipitó en un barranco ubicado en una curva de la carretera que conduce de la población de Tejutla a la de Concepción Tutuapa, a unos 280 kilómetros al oeste de la capital guatemalteca, por imprudencia del conductor.
«El chófer iba muy rápido y al llegar a la curva le fallaron los frenos y nos fuimos al barranco», dijo a medios locales unos de los supervivientes del accidente.
Las víctimas, fallecidos y heridos eran ex Patrulleros de Autodefensa Civil (PAC), paramilitares que colaboraron con el Ejército a combatir a las fuerzas guerrilleras durante la guerra interna que padeció Guatemala entre 1960 y 1996, originarios de la comunidad de Tejutla del departamento de San Marcos.
Se dirigían a Concepción Tutuapa a cobrar el pago de una indemnización que les otorga el Estado por los servicios prestados.
«En la camioneta (autobús) veníamos como 60 personas, todos ex patrulleros que íbamos a Concepción Tutuapa a cobrar», precisó el superviviente.
Sin esperar a que llegaran los fiscales del Ministerio Público, los familiares de las 14 fallecidos levantaron los cadáveres, y por sus propios medios, se los llevaron hacia las diferentes comunidades de Tejutlán para ser sepultados.
Según medios locales, el hospital de San Marcos, hacia donde fueron llevados los heridos, colapsó debido a que no cuenta con suficiente personal médico y recursos para atender la emergencia. EFE