Al menos 397 personas han muerto a causa de las inundaciones registradas en los últimos días en varios países del oeste y del centro de África, confirmó ayer la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de Naciones Unidas (OCHA). La Oficina añadió que hay más de 1,8 millones de afectados y que “la situación se agrava cada día que pasa”.
Según explicó en una rueda de prensa la portavoz de la OCHA, Elisabeth Byrs, estas cifras ya doblan a las de todo el 2009, cuando hubo 195 muertos y 823 mil afectados. Además, las inundaciones han favorecido la propagación del cólera en la región, que desde el pasado junio ha provocado 1.776 fallecimientos, de entre los más de 52 mil casos registrados, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS). Nigeria es el país más afectado por el cólera, con 1.555 muertos y más de 38 mil casos diagnosticados; seguido de Camerún, con 515 fallecimientos y casi 8 mil casos, y del Chad, con 141 muertos y 4.215 casos. El incremento de muertos y afectados por las inundaciones obedece al aumento de las lluvias torrenciales.
La OCHA situó la zona más afectada del país en Cotonou y sus alrededores. Las escuelas continúan como lugar de refugio para los damnificados.