La valiosa obra pictórica de Miguel de Santiago, uno de los artistas más destacados del siglo XVII, es intervenida por el Fondo de Salvamento del Centro Histórico de Quito, Fonsal.
Los trabajos empezaron en mayo pasado y durarán tres años. Rosa Torres, encargada de la restauración, explicó que en el convento hay más de cuarenta lienzos sobre la vida de San Agustín. Su valor iconográfico y artístico lo identifican como una de las colecciones más importantes del patrimonio religioso y cultural del país.
Los cuadros son intervenidos, porque el viento, cambios de temperatura, agua, humedad, hongos e insectos, entre otros factores, ocasionaron su deterioro.
El Fonsal como parte de su programa de difusión institucional, paralelamente al proceso de restauración de la obra pictórica, decidió instalar este taller abierto al público, el primero de este tipo en el Ecuador y Sudamérica.
Las puertas del convento ubicado en las calles Guayaquil y Chile, centro de Quito están abiertas de lunes a viernes, de 09h00 a 12h00 y de 15h00 a 17h00.
