Las últimas tropas de combate de Estados Unidos abandonaron el miércoles Irak, en un momento, que el Departamento de Estado calificó de “histórico” y que marca el fin de la llamada ‘Operación Libertad Iraquí’ que comenzó en 2003.
Las operaciones de combate, terminarán oficialmente el 31 de agosto.
“Es un momento histórico”, dijo el portavoz del Departamento de Estado, P.J. Crowley, quien insistió, de todos modos, en que no supone el fin de la misión estadounidense en el país.
“Estamos acabando la guerra, pero no estamos acabando nuestro trabajo en Irak”, dijo Crowley, quien señaló que EE.UU. tiene un “compromiso a largo plazo” con ese país, donde permanecerán 50.000 soldados estadounidenses que participarán, entre otras cosas, en tareas de formación de las fuerzas iraquíes.
La Operación Libertad Iraquí comenzó el 20 de marzo del 2003, durante la Presidencia de George W. Bush (2001-2009), quien concluyó que el régimen del fallecido Sadam Husein, tenía armas de destrucción masiva que suponían una amenaza para Occidente, por lo que era necesario derrocarlo.
A partir del primero de septiembre arrancará la operación ‘Nuevo Amanecer’, en la que los soldados estadounidenses cumplirán misiones de ayuda y asesoramiento a las fuerzas iraquíes.