Sáb. Nov 23rd, 2024

Ana María, 26 años. Mi vida nunca ha sido completamente feliz. Viví solo con mi padre. Mi madre, a días de nacida, nos abandonó. Mi infancia fue una mezcla de soledad y falta de amor. Mi padre se esmeró mucho por hacerme feliz, pero las obligaciones laborales siempre lo mantenían muy distante. Estudié en uno de los colegios más prestigiosos de Quito. Hace poco terminé mi carrera en administración de empresas. Ingresé a una empresa de turismo, en ella conocí a la razón de mi alegría. Mi novio es lo más especial que ha llegado a mi vida, cumplimos hace poco dos años de relación. Pero surgió un problema. Mi pareja me pide que nos demos un tiempo, se queja de mis celos y de mi control. Pero yo pienso que esa es la única manera de mantener una relación comprometida hacia un futuro juntos. Lo llamo 5 veces al día, le envío correos, me gusta verlo a diario. No lo estoy asfixiando. No terminaré con él. No puedo ser feliz sin su amor.
Mi Querida Ana María:
Tu amor es enfermizo. Busca ayuda y todo mejorará.
Tu Amiga Karina