El proceso para restablecer las realciones diplomáticas con Colombia va por buen camino. Esperemos que el vecino del norte no ofrezca otra sorpresa que impida reanudar el diálogo.
A lo largo de este año, se han dado varias muestras de buena voluntad para retomar las relaciones diplomáticas con Colombia, tras el ataque de Angostura en el 2008. Una de ellas fue la visita del entonces presidente
Uribe a la capital de los ecuatorianos, en el marco de una reunión de la UNASUR, para ayudar a Haití por el terremoto.
Justo cuando parecía que el proceso de diálogo iba por buen camino, el diario El Universo, descubrió que el servicio de inteligencia de Colombia, tenía intervenidos los teléfonos del Presidente Rafael Correa.
Ahora, Correa ha desmotrado su buena voluntad, al acudir a la investidura de Santos, al tiempo que el colombiano, entregó los computadores incautados al ex lider de las FARC. Esperemos que esta vez, todo camine sobre ruedas y nada impida que continúe el diálogo con el país vecino.
