Jue. Nov 21st, 2024

Jerusalén, 31 ago (EFE).- La Organización para la Liberación de Palestina (OLP), denunció hoy otra ocupación israelí de tierras cisjordanas y aseguró que con esta estrategia Israel muestra su rechazo a la salida del conflicto a través de la solución de dos Estados.

«La notificación de hoy representa claramente la intención deliberada de Israel de acabar con la presencia palestina sobre la tierra e imponer obstinadamente y ‘de facto’ la solución de un Estado», criticó Hanan Ashrawi, miembro del comité ejecutivo de la OLP, en un comunidad difundido por su oficina.

La política palestina hizo referencia al anuncio de Israel de que declara como estatales más de 4.000 metros cuadrados de tierra en el bloque de asentamientos de Gush Etzion, situado entre las ciudades palestinas de Belén y Hebrón, un paso ilegal según el derecho internacional.

El paso ha sido dado después de que el Ejército israelí argumentara que en su opinión no existe reclamación privada de posibles propietarios palestinos sobre la citada tierra, informó hoy la edición digital del diario «Yediot Aharonot».

«Bajo su última campaña de agresión y terror en Gaza, Israel llevó a cabo una campaña de intensificación de la violencia, expansión de los asentamientos y demolición de casas», rechazó Ashrawi.

Según la política, este operativo se inició a mediados de junio, cuando el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, responsabilizó al movimiento islamista Hamás de la desaparición de tres jóvenes judíos que hacían autostop cerca de Gush Etzion, en Cisjordania.

Desde entonces, «32 palestinos han muerto en Cisjordania (incluido Jerusalén Este), aproximadamente 1.397 palestinos han resultado heridos, 1.472 nuevas unidades de vivienda en asentamientos han sido anunciadas, unos 1.753 palestinos han sido detenidos y al menos 50 construcciones propiedad de palestinos, demolidas», enumeró Ashrawi.

«Es evidente que Israel, por sí solo, quiere sabotear cualquier posibilidad para la paz y la solución de los dos Estados», sentenció la política palestina.

En su opinión, «el Gobierno israelí ha probado una vez más que no es un socio para la paz ni un miembro de la comunidad internacional que respeta el Estado de derecho global o el consenso. Israel debe hacer frente a sanciones legales, políticas y económicas por sus violaciones del derecho internacional en Palestina», solicitó.

«La impunidad, criminalidad e ilegalidad son el camino seguro a la guerra, no a la paz», concluyó Ashrawi.

La decisión ha sido duramente criticada por organizaciones no gubernamentales israelíes y movimientos pacifistas y antiocupación como «Paz Ahora», que consideran que significa colocar un nuevo obstáculo para una solución negociada al conflicto entre palestinos e israelíes.

La mencionada zona, conocida como el asentamiento Gvaot, estaba hasta ahora considerada un barrio de la colonia Alon Shvut, ilegal según el derecho internacional, y hasta la fecha no había sido reconocida por Israel debido a que se construyó sin permisos estatales, expuso el «Yediot Aharonot».

En julio de este año, los colonos del lugar volvieron a exigir su reconocimiento estatal tras el asesinato de los tres estudiantes judíos desaparecidos.

A pesar del anuncio, el Gobierno israelí deberá esperar los 45 de días de rigor para permitir posibles alegaciones y reclamaciones. EFE