Washington, 30 ago (EFE).- Las fuerzas militares estadounidenses prosiguieron hoy sus ataques aéreos contra posiciones del Estado Islámico (EI) en las proximidades de la presa de Mosul, en el norte de Irak, y lanzaron ayuda humanitaria en la ciudad de Amirli.
Según indicó el Mando Central estadounidense en un comunicado, hoy se efectuaron cinco ataques, tanto con cazabombarderos como con drones, que destruyeron un vehículo armado, posiciones de combate del EI, armas y ocasionaron «daños significativos» a un edificio controlado por ese grupo yihadista.
Por su parte, el portavoz del Pentágono, el contraalmirante John Kirby, informó en un comunicado que también se efectuó, a petición de las autoridades iraquíes, una misión de lanzamiento de ayuda humanitaria en la ciudad de Amirli, con apoyada de bombardeos.
La misión se efectuó con el apoyo aéreo de sus «socios» de Australia, Francia y Gran Bretaña, y en ella se lanzaron alimentos y agua sobre la Amirli, unos 200 kilómetros al norte de Bagdad.
Dicha población agrícola, de unos 15.000 habitantes, en su mayoría chiíes, es objeto desde hace unos dos meses de un asedio por parte de las fuerzas yihadistas del EI.
El Mando Central informó de que «todas las aeronaves abandonaron las zonas de ataque sin sufrir daños».
Desde el 8 de agosto, las fuerzas militares de Estados Unidos han llevado a cabo un total de 115 ataques aéreos en Irak, dentro de la operación que autorizó el presidente Barack Obama para apoyar a las fuerzas iraquíes y kurdas en la defensa de su territorio ante el avance del Estado Islámico en el norte de ese país.
Irak es escenario desde junio de un conflicto armado, con tintes sectarios, por la ofensiva lanzada por insurgentes suníes encabezados por este grupo yihadista en la mitad norte del país.
El EI efectuó rápidas conquistas y a finales de ese mes declaró un califato islámico en los territorios de Siria e Irak bajo su control.
Estados Unidos está evaluando la posibilidad de atacar también sus posiciones en suelo sirio, con el objetivo de frenar sus avances de manera más efectiva, pero ha insistido en que la solución al problema pasa por una estrategia de integración regional para combatir a los grupos más extremistas.
El Pentágono ha informado de que esta campaña le está costando unos 7,5 millones de dólares diarios como media.
Se espera que Obama aborde el avance de los yihadistas de EI en Irak y Siria y busque apoyos a su estrategia para combatirla entre sus socios de la OTAN en la cumbre que celebrará esta organización militar el jueves y viernes próximos en Gales (Reino Unido). EFE