La coordinadora general de la fundación feminista ecuatoriana Yerbabuena, Johanna Izurieta, criticó hoy en declaraciones a Efe en Madrid el decreto que modifica las condiciones para el asociacionismo en Ecuador.
«Nos planteamos cómo ser sostenibles y cómo salir adelante cuando existe un Decreto Ejecutivo 16 que perjudica a las organizaciones sociales y las pone cada vez más trabas», dijo Izurieta.
Añadió que hay un «panorama poco alentador» en el país para el asociacionismo, especialmente tras la prohibición hace unos meses de la Fundación Pachamama, defensora de los derechos de los indígenas.
Izurieta se encuentra en Madrid como parte de una delegación de Mujeres Populares y Diversas de Ecuador, Colombia, Perú y Brasil, invitadas por la ONG Oxfam Intermón para participar en un encuentro de organizaciones de mujeres.
La activista lamentó que los recortes en la cooperación española hayan reducido las colaboraciones entre instituciones de España y organizaciones de Ecuador.
Por otra parte, Izurieta destacó como puntos claves del trabajo de la Fundación Yerbabuena el fortalecimiento de las organizaciones comunitarias y el desarrollo local.
«Es un trabajo que hacemos con las organizaciones de mujeres de base, intentamos facilitarles sus iniciativas», explicó.
También señaló que el trabajo de la fundación aborda las especificidades de muchos colectivos, entre ellos los transexuales, que, según destacó, «han sido de los colectivos más marginados, y son uno de los ejes del trabajo intercultural que realizamos».
Además de su trabajo en la Fundación Yerbabuena, Izurieta es directora provincial del movimiento político ecuatoriano Ruptura 25 en la provincia de Guayes, y forma parte de su Comité Ejecutivo a nivel nacional.
El movimiento se encuentra «planeando la agenda programática de cara a las presidenciales de 2017», dijo Izurieta, en la que tendrán un lugar destacado la agenda feminista y las propuestas de descentralización.
Izurieta denunció que, después del distanciamiento de Ruptura 25 del Gobierno del presidente Rafael Correa, este «definitivamente perdió todas las composturas de género que le quedaban, que no eran muchas».
Fuente: EFE