Las centrales sindicales y el Gobierno de Ecuador coincidirán el próximo jueves en las calles de Quito, cada cual por su lado, para celebrar el Día Internacional del Trabajo, en una jornada en la que también se abrirá el debate sobre un nuevo código normativo para el sector.
Edgar Sarango, presidente en turno del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), la mayor asociación sindical del país, señaló hoy que las organizaciones obreras marcharán por las calles de Quito «como siempre lo han hecho», aunque el recorrido no concluirá la plaza de San Francisco, como en el pasado, porque ahí lo hará el Gobierno.
«Será una marcha unitaria» de los sectores sindicales y de otras organizaciones aliadas, aunque el Gobierno «tiene todo el derecho» de hacer su propia movilización, añadió el dirigente sindical.
La movilización obrera en Quito comenzará en las afueras del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) y concluirá en la plaza de Santo Domingo, en el casco colonial de la ciudad, muy cerca de San Francisco, donde se concentrará el oficialismo.
«En los dos últimos años se ha traslado el cierre a la plaza de Santo Domingo; nosotros no tenemos problema» en cambiar el destino de la marcha, insistió Sarango al remarcar que «el objetivo es rendir un homenaje justo a los mártires de Chicago» (los trabajadores estadounidenses cuya represión dio origen a esta celebración) y presentar «las propuestas del sector sindical».
El dirigente no ocultó la cercanía con el Gobierno del presidente izquierdista Rafael Correa que, según dijo, «ha encaminado muchas políticas que han favorecido a los sectores sociales».
Sin embargo, «creemos que las políticas laborales todavía no son coherentes con el proceso de cambio» que vive el país, añadió Sarango al señalar que la discusión del nuevo Código del Trabajo será un espacio para que el movimiento obrero pueda «presentar propuestas no sólo coyunturales o reivindicativas, sino estructurales».
MARCHA POR EL DÍA DEL TRABAJO
Esa nueva normativa debe «recoger las conquistas históricas de la clase obrera, pero también propuestas para ir hacia el pleno empleo, en un marco de diálogo y concertación», y estrategias salariales que apunten al «salario digno para mejorar la situación económica de cada uno de los ecuatorianos», añadió.
«El sector sindical tiene que ser propositivo» y convertirse en un «pilar fundamental para consolidar los procesos de cambio» en América Latina, sostuvo tras explicar que las marchas por el 1 de mayo organizadas por el FUT se replicarán en «casi todas las ciudades del país».
De su lado, los sindicatos del sector público afines al oficialismo han convocado a una marcha que partirá desde el llamado «Parque del Arbolito» hasta la plaza de San Francisco, donde se desarrollará un festival en homenaje al Día Internacional del Trabajo.
No obstante, los principales dirigentes del movimiento oficialista Alianza País se reunirán el próximo jueves en la ciudad costera de Esmeraldas en una asamblea nacional de dicho grupo que, entre otras cosas, evaluará los reveses electorales encajados en los comicios municipales y provinciales del pasado 23 de febrero.
En esa cita también se tiene previsto que el ministerio de Trabajo presente el proyecto del nuevo código laboral para su socialización y debate.
Fuente: EFE