La oposición aumentó su poder en ciudades clave de Ecuador al arrebatar al oficialismo las alcaldías de la capital, Quito, y Cuenca, además de conservar la estratégica ciudad de Guayaquil en las elecciones locales celebradas hoy.
A la espera de resultados oficiales, varias firmas encuestadoras dieron la alcaldía de Quito al opositor Mauricio Rodas con un margen de votos en torno al 58,7 %, mientras que el actual alcalde, el oficialista Augusto Barrera, obtiene entre el 39,5 y el 40,4 %.
En Guayaquil (suroeste) el veterano opositor Jaime Nebot conserva el ayuntamiento al conseguir entre el 59,5 y el 60,2 % de los sufragios, frente a su joven oponente oficialista, Viviana Bonilla, que consiguió entre el 36,57 y el 38,1 %.
Estos resultados corresponden a encuestas a boca de urna de las firmas Market y Cedatos, difundidos por el canal televisivo Ecuavisa.
También en Cuenca, tercera ciudad del país, el opositor Marcelo Cabrera, de Suma, logró la alcaldía con entre el 50,4 y el 50,6 % en detrimento del alcalde oficialista Paúl Granda, que consiguió entre el 44,9 y el 47,2 % de los sufragios.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, reconoció, a partir de estos sondeos, la derrota de su movimiento, Alianza País (AP), en la elección de las alcaldías de Quito y Guayaquil.
Correa, en un acto en la sede de Alianza País en Quito, descartó que su proyecto de «Revolución Ciudadana» que ha aplicado haya sido derrotado, pese a que en la campaña electoral advirtió reiteradamente del riesgo para este programa político si el oficialismo perdía la alcaldía capitalina.
«Hemos tenido un importante revés en la capital, que habrá que analizar», dijo Correa al admitir que esa ciudad «es importante por cuestiones de gobernabilidad».
El alcalde Barrera también aceptó la derrota y deseó «éxitos» a Rodas, que, de confirmarse los resultados preliminares, se hará cargo del municipio.
«Hoy es un día triste», pero «no necesariamente es uno de esos días duros» que ha afrontado Ecuador, dijo Barrera, quien agradeció el «enorme apoyo» de los quiteños a Alianza País, formación que conserva «un porcentaje sólido y robusto» de apoyo en la ciudad, agregó.
Rodas, aspirante a la alcaldía por la alianza Suma-Vive, compareció ante sus seguidores y prometió «una alcaldía para todos los quiteños» tras conocerse los resultados de las encuestas.
«Hoy el pueblo de Quito ha dicho claro y fuerte que sí podemos vivir mejor. Vamos a impulsar una nueva visión, una visión fresca, moderna y de futuro para Quito, vamos a hacer de esta la ciudad maravillosa que siempre hemos soñado, respetando a todos», manifestó.
«La nuestra será una alcaldía para todos los quiteños, de todos los colores, porque todos juntos vamos a vivir mejor», apostilló.
En otros gobiernos descentralizados, como la prefectura (representación provincial) de Pichincha, cuya capital es Quito, los sondeos indican un «amplio triunfo», como lo calificó Correa, del oficialista Gustavo Baroja, con más del 58 por ciento de los votos frente a Rodrigo Gómez de la Torre, con el 34,3 %.
El gobernante también puso de relieve el resultado alcanzado por su candidata a la alcaldía de Guayaquil, Viviana Bonilla, una joven profesional que, pese a perder, obtuvo resultados «extraordinarios», dijo.
Los reveses encajados en esta jornada significan que «nada está ganado, lo tenemos que ganar día a día», remarcó Correa.
En una jornada que fue calificada como normal por los observadores internacionales que vigilaron el proceso, los colegios electorales cerraron tras diez horas de recepción de votantes.
Más de once millones de ecuatorianos fueron facultados para designar hoy, de entre 27.895 candidatos inscritos, a 221 alcaldes, 23 prefectos provinciales, 867 concejales urbanos, 438 rurales y 4.079 vocales de las juntas parroquiales.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) evaluó como positiva y normal la jornada electoral, salvo pequeños incidentes «focalizados», criterio que fue compartido por los observadores internacionales.
El CNE suspendió el proceso de votación en el recinto Santa Rita, del cantón San Lorenzo, de la provincia de Esmeraldas (noreste), donde se destruyeron papeletas, según precisó Roxana Silva, vocal del organismo.
El presidente del CNE, Domingo Paredes, indicó que las elecciones en los lugares donde se han suspendido las votaciones se celebrarán en un plazo de diez días. EFE